domingo, 5 de julio de 2015


Así nos sentimos frente a un otro ciertas veces, por debajo de él, encadenado a comunicarle nuestras intenciones, a dar explicaciones, a no dañarlo utilizando la mentira como herramienta cuando es "necesario".
Qué diferente me siento frente a los otros, pero he de reconocer que algún otro me hace sentir real, no como los otros.
Aunque, si no estamos con un otro, ¿qué nos asegura que estamos existiendo? Un hecho aislado no presenta fuentes seguras que lo atestigüen.
Nadie escucha cuando un árbol cae y se destruye en la soledad, sus semejantes carecen de oídos. 
Cuántos árboles vemos que no ayudan usando esa carencia como excusa.
Y cuántos terminan caídos por ser empáticos, también los hay que dejan caer sus hojas, pero sin moverse.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario