sábado, 23 de noviembre de 2013

Fascinación.

Poseo una curiosa obsesión con el suicidio. Escribí acerca de él más a menudo de lo que noto, y todas las historias que se me ocurren contar tienen este final trágico. Imaginé el final de la mía, me hizo recordar a cuando se busca anticipar cómo terminará un libro, pero cuando parece estar más cerca del punto final el/la escritor/a coloca un punto y coma. Éste símbolo se utiliza convencionalmente en todo el mundo, nadie debe darse cuenta de que tiene un significado por demás romántico.
Personalmente lo uso cuando continúo una oración que antes había dada por terminada. En mi mente se cruzan cantidades infinitas de metáforas en las cuales se podría utilizar el ";" como recurso. Siendo la vida mi favorita. ¿Cuántas muertes son ocasionadas por no saber dónde contextualizar un punto y coma? Suena patéticamente estúpido hablar de un signo de puntuación como una vía de escape al dolor. Más adelante tal vez hable de los dos puntos como una posibilidad cínica de expresar sentimientos, el "*" se convertiría en aquel filtro que nos ponemos para no comunicarnos insultando.

1 comentario: